La moda circular, aunque brilla con luz propia y está repleta de creatividad, ocupa la segunda posición en la clasificación de empresas más contaminantes del planeta. Según Naciones Unidas, es responsable del 10% de las emisiones globales de carbono, echa mano de los recursos hídricos planetarios de tal forma que se estima que consume más de 93.000 millones de metros cúbicos de agua anuales, mientras que el 20% de las aguas residuales del mundo son vertidas por la industria textil.
A todo esto, hay que sumar que la moda rápida lanza novedades en sus colecciones cada pocas semanas, así que entre unas y otras no hay tiempo de aburrirse. El mensaje al consumidor es «si ya has comprado, repite”.
Este artículo, escrito desde la perspectiva de un especialista en sostenibilidad textil, te explicará en profundidad qué es la moda circular, cómo funciona, por qué es clave para el futuro de la industria y cómo puedes sumarte a ella desde tu rol como consumidor o emprendedor.
¿Qué es la moda circular?
La moda circular es la aplicación del concepto de economía circular al mundo de la moda. Consiste en diseñar y producir ropa para que duren más, sean reutilizadas, reparadas y, finalmente, recicladas o retornadas a la naturaleza sin liberar contaminación.
Es decir, en vez de seguir el modelo lineal convencional de «fabricar-comprar-tirar» de la moda circular como se busca crear un circuito cerrado de uso continuo de los materiales. No se trata de que se acabe con la basura textil, sino de que lo que hoy consideramos basura sea un recurso para nuevos productos.
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Origen y evolución del concepto
El término “economía circular” se popularizó gracias a la Fundación Ellen MacArthur, que propuso un cambio de paradigma en la forma en que producimos y consumimos. En la moda, este concepto comenzó a ganar fuerza a partir de la década de 2010, cuando el impacto ambiental de la industria textil empezó a ser más visible para el consumidor medio.
En sus inicios, la moda circular estaba asociada principalmente al reciclaje textil. Hoy, sin embargo, abarca prácticas como el ecodiseño, el alquiler de ropa, la reventa, la reparación y la trazabilidad total de la cadena de producción, aplicándose tanto en prendas de uso casual como en vestidos para mujer pensados para durar muchos años.
Principios fundamentales de la moda circular
- Diseñar para durar: Prendas resistentes, atemporales y fáciles de reparar.
- Usar materiales sostenibles: Fibras orgánicas, recicladas o de bajo impacto ambiental.
- Mantener el producto en uso: Promover la reparación, el alquiler, el intercambio o la reventa.
- Reciclar y regenerar: Transformar prendas al final de su vida útil en nuevos textiles o en compost si son biodegradables.
- Eliminar sustancias tóxicas: Usar tintes y procesos libres de químicos peligrosos.
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Diferencias entre moda circular y moda sostenible
Aunque ambas comparten objetivos similares, no son idénticas:
- Moda sostenible: es un enfoque más amplio que busca reducir el impacto ambiental y social de la industria.
- Moda circular: se centra en cerrar el ciclo de vida de los productos, asegurando que los materiales puedan reintegrarse al sistema.
En resumen: toda moda circular es sostenible, pero no toda moda sostenible es circular.
Beneficios de la moda circular
Beneficios ambientales
- Reduce significativamente los residuos textiles (se estima que cada año se desechan más de 92 millones de toneladas de ropa en el mundo).
- Disminuye el consumo de agua y energía.
- Evita la liberación de microplásticos en los océanos.
Beneficios económicos
- Fomenta nuevos modelos de negocio como el alquiler o la reventa de ropa.
- Prolonga la vida útil de los productos, generando ahorro para los consumidores.
Beneficios sociales
- Promueve empleos locales en reparación, reciclaje y confección artesanal.
- Incentiva la transparencia y la trazabilidad en la cadena de suministro.
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Ejemplos internacionales de moda circular
- Patagonia (EE. UU.): su programa “Worn Wear” repara y revende prendas usadas.
- H&M Conscious (Suecia): recoge ropa usada en tiendas para reciclarla.
- Mud Jeans (Países Bajos): alquila jeans y luego los recicla para crear nuevos.
Casos de moda circular en Latinoamérica
- Verde Permuta (Argentina): plataforma de intercambio y venta de ropa de segunda mano.
- La Manzana Roja (México): ofrece servicios de reparación y customización de prendas.
- Caralarga (México): crea accesorios a partir de desperdicios textiles de fábricas.
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Cómo sumarte a la moda circular como consumidor
- Compra menos y mejor: elige prendas de calidad que realmente uses.
- Repara antes de reemplazar: un pequeño arreglo puede prolongar la vida útil de una prenda inferior de mujer, evitando que acabe como residuo textil.
- Alquila para ocasiones especiales: evita comprar ropa que usarás una sola vez.
- Participa en intercambios de ropa: da nueva vida a prendas que ya no usas.
- Recicla adecuadamente: entrega tus pantalones para mujer y demás prendas en puntos de recogida especializados o programas de devolución de marcas.
- Apoya marcas circulares: busca certificaciones y transparencia en sus procesos.
Cómo aplicar la moda circular si tienes una marca
- Implementa ecodiseño para que las prendas sean más fáciles de reparar y reciclar.
- Usa materiales reciclados o biodegradables.
- Ofrece un servicio postventa de reparación o recompra de productos.
- Comunica de forma transparente tu impacto ambiental.
Retos y barreras actuales
- Falta de infraestructura para el reciclaje textil.
- Educación del consumidor: muchas personas desconocen el impacto de la moda lineal.
- Costos iniciales elevados para las marcas que quieren ser 100 % circulares.
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El futuro de la moda circular
Con las regulaciones europeas que prohíben la destrucción de excedentes y exigen ecodiseño, la moda circular pasará de ser una opción voluntaria a un estándar de la industria. Se espera que para 2030, un porcentaje significativo de las marcas ya opere bajo este modelo.
Conclusión
La moda circular no es una tendencia pasajera, sino un cambio de paradigma que busca reconciliar la creatividad de la moda con el cuidado del planeta. Sumarte no te costará nada: desde comprar de forma más responsable hasta transformar tu empresa textil para que sea circular.
Al final, cada prenda que arreglamos, intercambiamos o reciclamos es un paso más para que algún día podamos vestir a la moda sin que parezca que estamos arañando el planeta: la Tierra también es nuestro hogar.